El hotel tiene una playa privada y ofrece muchas actividades, incluyendo: el mini club, la sala de casino, un campo de golf (dentro de un radio de 3 km, por una cuota) y una cancha de tenis (por una cuota). Es posible aparcar en el mismo lugar (no es necesario reservar) y los precios se aplican diariamente. Se admiten animales de compañía a petición con un coste adicional.

En estilo Belle Epoque, los alojamientos tienen una cama matrimonial, conexión a Internet Wifi, aire acondicionado, despertador automático, teléfono de marcación directa, TV y una ventana/balcón con vistas a la ciudad, el jardín o el mar.

El hotel cuenta con 2 restaurantes de cocina internacional. El Vistamar tiene una magnífica terraza panorámica abierta sólo en verano, y ofrece una cocina excepcional basada en el pescado.

El hotel está situado en un edificio clasificado como monumento histórico.